Tengo la sensación de que el mundo está cambiando en este preciso instante. De que la vida está dando un giro de 180º y yo estoy sintiendo como vuelca mi cuerpo. Tengo la sensación de que un ciclo se ha acabado, del todo, y de que ahora empieza uno nuevo. Esta vez de verdad.
No sé qué me espera al doblar la esquina, cuando la vida recupere al fin la estabilidad. Cuando deje de sentir que todo da vueltas y más vueltas. Sé que es algo bueno. Sé que también está lejos de aquí, aunque solo sea por unos meses. Lo que no sé es lo que me espera a la vuelta. No sé si yo habré cambiado, o si el mundo que me rodea será diferente. Si tendré alguien que venga a recogerme y me diga que me ha echado de menos. Si existirá la nostalgia en los que no se vienen conmigo.
Sé que, incluso en el fin del mundo, sus besos seguirán sabiendo a caramelo. Y que en cada palabra escrita leeré su nombre. Sé que no le dejaré de querer por irme. Lo que no sé es si él sentirá lo mismo. O si el mundo y la distancia pueden cambiarnos tanto para hacernos olvidar. Si la vida es tan cruel para volver a girar...
Sé que tendré que hacerlo. Llevo preparándome para ello mucho tiempo. Sé que si no lo hago me arrepentiré toda la vida. Lo que no sé es si me arrepentiré de haberme ido...